El programa permite que las familias puedan dejar a sus mayores durante los sábados entre las 12:00 y las 20:00 horas, en un tiempo máximo de siete horas. El personal que atiende a los usuarios está compuesto por dos gerocultoras y un empleado de transporte adaptado que realice los desplazamientos que permitan el acceso al centro. Ya en el interior del centro se habilita una sala común donde estarán al cuidado de los profesionales en todo momento.

Los trabajos que se desarrollarán en estas jornadas irán encaminados al ocio y entretenimiento y contemplan desde actividades relajantes y lúdicas como discusiones en grupo, lectura o juegos de mesa, hasta ejercicios físicos como paseos, motricidad fina o juegos. Todas ellas se llevarán a cabo por las gerocultoras y se realizarán bajo la supervisión de la terapeuta ocupacional y la fisioterapeuta.

Para la concejala de Sanidad y Bienestar Social, "gracias a este programa las familias pueden dejar a sus mayores los sábados para disfrutar de un poco de tiempo libre sabiendo que sus familiares están perfectamente atendidos. Así tratamos de evitar situaciones de estrés apoyando a estas familias y reconociendo, además, el importante esfuerzo que realizan".

El precio por persona y día es tan sólo el coste de la comida (5.50 euros) e incluye el servicio de transporte adaptado (que es opcional), la manutención y la estancia por un periodo máximo de siete horas.